lunes, 3 de diciembre de 2007

Los Papalagi: El metal redondo y el papel tosco

"Cuando hablas a un europeo sobre el Dios del Amor, sonríe y pone cara divertida. Sonríe por tu estupidez. Pero tan pronto como le muestres una pieza de metal redondo y brillante o una hoja de papel tosco, entonces sus ojos se iluminan y la saliva empieza a babear por sus labios. Dinero es su único amor, el dinero es su Dios."

7 comentarios:

Anónimo dijo...

El primer capítulo del libro de los Papalagi dice como un jefe de una tribu del pacífico sur (Tuiavii de Tiavea) viaja a europa y va contando las constumbres que tiene el hombre blanco, es decir, como van vestidos, que suelen hacer...
Primero comienza a hablar de como van vestidos el hombre blanco; usando taparrabos y telas de animales ajustadas al cuerpo que no les permiten ver la carne real de la persona, en el hombre solamente suele verse al aire libre la cabeza y las manos, siguen siendo tan carne como cualquier parte del cuerpo pero no le dan tanta importancia como al resto. Explica como tanto los hombres como las mujeres llevan una especie de barcos (zapatos) en los pies que le hacen que el pie huela mal, y que pierda la constumbre de poder trepar los arboles. Las mujeres llevan pieles de animales y/o telas ajustadas al cuerpo mas finas que las que lleva el hombre. Estas telas que lleva la mujer hacen que sean atractivas , y que el hombre caiga en una especie de tentación.
Para el jede de la tribu le cuesta mucho adaptarse en el medio en el que se vive en Europa, ya que la vida y las constumbres que se dan alli son totalmente diferentes a la de su tribu natal.Ven mal que las personas escondamos nuestro cuerpo con telas, con lo que demostramos con esto que no damos la verdadera importancia que deberiamos de darle al sol.
Segun el jefe de la tribu de los papalagi, nos dice que aqui en Europa las personas amamos a otras antes de ver su cuerpo interior, es decir, las personas estamos cubiertos de telas o pieles con lo que nos hace que no se nos pueda ver nuestro cuerpo interior.

Anónimo dijo...

Magdalena Cáceres Córdoba.
El jefe Samoano se asombraba de como los papalagis le dabamos tanta importancia al metal redondo y al papel tosco, le daban mas importancia que incluso la vida de las personas, decia que el que no posiera ese metal o ese papel no era nadie, para los papalagis el metal redondo y el papel tosco eran como un dios es su unico amor lo admiraban y lo adoraban.
Los papalagis podian darlo todo por ese metal y ese papel incluso su vida, su familia, su felicidad, todo eran capaces de darlo por ese metal o el papel.
Siempre los llevan consigo guardado debajo de sus pieles, y las grande cantidades de ese metal las tienen guardadas en una canastas de piedra.
Cuanto mas poseian de ese metal o del papel mas querian incluso si ya tenian cubiertas todas sus necesidades.
Trabajaban todo el dia, el rico mandaba sobre el mas pobre, y las mujeres ricas le mandaban a sus sirvientas los trabajos pesados y agotadores del hogar mientras ellas hacian el trabajo facil o no hacian nada.

Anónimo dijo...

Unai Moral

“… el dinero lanza a la confusión infinita…”

Está frase es una de las que en este texto Tuiavii dirige a su comunidad y creo que es una frase que en cualquier época de la historia no deja de ser una cita realmente sabia y que no se debería de olvidar en el día a día.
Hoy en la época que nos ha tocado vivir no podríamos quitar de un plumazo el dinero de en medio por que es algo que esta tan arraigado que provocaría el caos mundia,pero sin duda que en nosotros si que esta el poder de no darle el valor tan excesivo que ahora le damos. El dinero es útil en nuestros días pero no debemos de basarlo todo en el,pues como bien nos dice Tuiavii sólo nos provoca sensación de felicidad pero no es la felicidad suprema, el dinero no da la felicidad total a la que todo ser humano aspira en esta vida, pues el dinero te puede dar un bienestar, sin duda, pero a su vez provoca codicia, ansias de tener mas aunque no lo necesites…
Para concluir solo decir que no se trata de odiar el dinero si no de darle su justo valor como algo necesario y práctico si mas.

Anónimo dijo...

Gabriel Hidalgo Sanchez
El papel tosco y el metal redondo, algo que en la vida de los Papalagis es vital, tanto es así, que seriamos capaces de dar nuestra propia familia, mujer, hijos e incluso quitar la vida al prójimo por este bien.
Los Papalagis necesitamos de el, pero tal es nuestra codicia que hace que el valor de este metal llegue a convertirse en nuestro Dios.
Por mucho que duela Tuiavii al plantear un punto de vista tan radical para nosotros, nos abre los ojos a la realidad y nos hace replantearnos nuestra forma de vivir, ya que al leer estas palabras te das cuenta de que estamos encadenados a este papel y que sin el no somos nada y llegar a la conclusión de que el dinero no da la felicidad si no que todo lo contrario, nos la quita.

Anónimo dijo...

Tuiavii de Tiavea es quien principalmente hace una descripción exacta de la sociedad europea regida por el dinero solo vale el dinero y sin el no eres nada ni nadie
seria conveniente aplicar el dicho"tanto vales tanto tienes" al rico le envidian por tener un gran capital económico,le adulan,le tratan como a un mismisimo "lord" Tiuavi ve también como genera codicias entre los mismos PAPALAGIS,
sin embargo ve como su poblado sin tener las riquezas que tiene el europeo con respecto al dinero ve como su forma de vida es mas simple mas facil mas en comunidad los unos con los otros.

Personalmente pienso que es una buena reflexion sobre la sociedad que lamentablemente está regida por el dinero y todas las consecuencias que conlleva ello.

Anónimo dijo...

Tuiavii dice que para los papalagis solo se nos ilumina los ojos y sentimos amor únicamente por el dinero y cuando decimos que solo es por Dios, es una gran mentira porque podría decirse que nuestro Dios es el dinero y que por el seriamos capaz de darlo todo, porque nada es más importante que el dinero.
Los papalagis mientras mas dinero tienen más quieren y cuando tienes el suficiente dejan de seguir haciendo trabajos pesados para ganar dinero, y en su lugar contrataran a alguien para que lo haga y esta persona lo hará para obtener ese dinero, aunque el trabajo no le guste nada.
Somos tan avariciosos que la riqueza o el dinero es nuestra felicidad.
Al final Tuiavii nos deja con una frase un poco cruel pero totalmente cierta:
-´´ el dinero no hace nunca más o menos
feliz, sino que lanza el corazón a la confusión infinita, que con dinero
nadie es nunca ayudado por sí mismo, que no os hará más contentos, más
fuertes, más felices; odiad el metal redondo y el papel tosco, del mismo
modo que odiáis a vuestro peor enemigo.´´
Es una frase que te hace reflexionar sobre la importancia que le damos y si en verdad es lo que importa, ya que se ha llegado incluso a matar por dinero y que solo respetamos a la gente por la cantidad de dinero que posee y no pos su persona, pero también hay que decir que no todo el mundo piensa de ese modo y para los que sí, que reflexionen y miren lo que en sí les aporta el dinero y si es lo importante y lo que le dará ganas de seguir día a día.

Anónimo dijo...

Mª Luisa Castro
Para el jefe samoano le costaba entender que el misionero les dijera: “Dios es amor” y para el hombre blanco el papel tosco y el metal redondo, es su verdadero Dios.
Se da cuenta que todo tiene un precio, lo único que no le ponían un precio era el aire para respirar, hoy día ya está contaminado. Esto es una de las graves consecuencias de la producción o lo que es lo mismo producción igual a dinero. Para Tuiavii , no comprendía que un hombre no fuera respetado por su nobleza o su valor, el respeto tía mucho que ver con la cantidad de dinero que se posea.
Otra cosa de la que se da cuenta es que hay dos clases de gente, una tiene que trabajar duro y otra trabaja solo un poco o nada.
El jefe samoano advierte a su tribu lo peligroso que es el dinero y que no se dejen cautivar por él, se podrían contagiar de la enfermedad de los blancos, la codicia.